Día 26 de enero de 2020. Domingo 3º del Tiempo Ordinario

LECTURAS

Isaías 8,23b-9,3

Salmo responsorial 26

1 Cor 1,10-13.17

Mateo 4,12-23

      Jesús hace una llamada general: "Convertíos y creed en el Evangelio porque el reino de los cielos está cerca". Este es el resumen de la predicación  y actividad de Jesús, que como relata el evangelio, esta en sus comienzos y que desarrollará por pueblos y aldeas de Galilea, con palabras y los signos que le acompañan.
       También hace llamadas personalizadas, hoy en concreto, nos habla de dos parejas de hermanos, pescadores del lago de Galilea: Pedro y Andrés, Santiago y Juan, que dejaron sus quehaceres de toda la vida para seguir a Jesús, y más tarde ser enviados a hacer como Jesús,  ser "pescadores de hombres".
       En estas llamadas, la general y la personalizada nos podemos ver cada uno de nosotros, porque Jesús también nos ha llamado por el bautismo a convertirnos al "reino de los cielos", y además cuenta con cada uno de nosotros para ser sus colaboradores, "discípulos misioneros" o "bautizados y enviados" que decía el lema del Domund-2019.

LECTIO DIVINA DESDE LA PARROQUIA DE SAN ROQUE DE HELLÍN: HAY LUZ

HOJA DOMINICAL DIOCESANA

DOMINGO DE LA PALABRA DE DIOS

    Con la Carta Apostólica "Aperuit illis", el papa Francisco ha instuído el Domingo de la Palabra de Dios, celebrado este domingo, 3º del Tiempo ordinario.  Con ello, nos invita a los cristianos  a que "leamos algún versículo  de la Biblia cada día, especialmente el Evangelio". Lo tenemos al alcance de la mano, "Evangelio 2020", que no es para dejarlo entre otras cosas en un lugar de casa, sino  que lo mantengamos a la mano, sea en la sala de estar o mesita de noche, podemos llevarlo si vamos de viaje, y dejémonos inspirar por él, y así descubriremos que Dios está cerca de nosotros, que ilumina nuestra oscuridad. En definitiva se trata  de "no dejar  empolvar la Biblia como si fuera un libro más".

Día 12 de enero de 2010. Bautismo del Señor

LECTURAS

• Isaías 42, 1-4.6-7

• Salmo responsoeial

• Hechos de los Apóstoles 10,34-38

• Mateo 3,13-17

      Del Bautismo de Jesús nos hablan todos los evangelios; fue el punto de arranque de la predicación y actividad pública de Jesús. En el Bautismo, Jesús recibió la señal de Dios de dedicarse por completo  a la misión por la que vino al mundo.
       Jesús, como tantos judíos de su tiempo, se desplazó desde Nazaret hasta el río Jordán, donde Juan Bautista predicaba y realizaba un bautismo de purificación. Jesús aún no siendo pecador, se hizo solidario  de los pecadores y como cargando sobre sí con los pecados de los demás, se puso en cola  y se hizo bautizar por Juan. 
       La voz de la nube: "este es mi Hijo amado, en quien me complazco",  nos indica la identidad de Jesús. En la resurrección de Cristo es cuando los apóstoles descubrieron que Jesús era el Enviado de Dios, el Mesías, como  ha dicho el apóstol Pedro, en la 2ª lectura: "Pasó por el mundo haciendo el bien y curando a los oprimidos por el diablo porque Dios estaba con él".
       Nosotros, por gracia de Dios, en el bautismo nos convertidos en hijos de  Dios por adopción, lo que significa que nos convertimos en otros "cristos", y se nos pide que, al igual que Jesús, pasemos por el mundo haciendo el bien, de modo que se note que somo sus discípulos.

LECTIO DIVINA DESDE LA PARROQUIA DE SAN ROQUE DE HELLÍN: FIIACIÓN

HOJA DOMINICAL DIOCESANA

Día 5 de enero de 2020. Domingo 2º de Navidad

LECTURAS

• Eclesiástico 24,12.8-12

• Salmo responsorial 147

• Efesios 1, 3-6.15-18

• Juan 1, 1-18

     El interior de Dios no lo podemos conocer por nosotros mismos si no es Dios  quien nos lo muestra. Dios hecho hombre, Jesucristo, nacido en Belén, es quien nos revela y descubre  cómo Dios nos ama y cómo quiere que participemos de su vida y felicidad.
     En la lectura del evangelio  de hoy se nos dice bien claro: "En el principio ya existía la Palabra... y la Palabra era Dios". San Juan con esta expresión la "Palabra" o el "Verbo"se refiere a Jesucristo, "Dios con nosotros", que es luz para la humanidad, aunque el mundo se resiste  a reconocerlo cuando se hizo  presente de manera visible en Jesucristo; y ya vemos las dificultades  que el anuncio  del evangelio ha encontrado a lo largo de la historia y en nuestros días.
   A pesar  de todas las oposiciones, la luz que es Jesucristo brilla en medio de las tinieblas, y los que lo reconocen por la fe son constituidos  hijos de Dios, como también nos ha dicho San Pablo en ese himno exultante de Efesios (2ª lectura), porque Dios nos ha bendecido por medio de Jesucristo, quien nos eligió  para ser hijos de Dios antes de la fundación del mundo.

LECTIO DIVINA DESDE LA PARROQUIA DE SAN ROQUE DE HELLÍN: ENCARNACIÓN

HOJA DOMINICAL DIOCESANA