sábado, 29 de diciembre de 2018

Día 30 de Enero de 2018. Domingo de la Sagrada Familia


LECTURAS

  • 1 Samuel 1,20-22.24-28
  • 1 Juan 3, 1-2.21-24
  • Salmo responsorial 127
  • Lucas 2, 41-52
     Jesús crece en una familia piadosa, que cumple las prescripciones de la religión judía. En su casa,  desde pequeño, Jesús aprende a ser  un buen judío.
     El evangelio pone de relieve quién es Jesús, y lo hace en el contexto de un momento importante en la vida de un judío como relato el pasaje evangélico: "Cuando el niño cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre". Subieron para la ceremonia  del "bar Mistwa", en la que el adolescente  lee la Biblia, la comenta y asume su compromiso religioso como judío, siendo considerado un adulto en el plano religioso.
     Ante la pregunta quejosa de su madre: "hijo, por que nos has tratado así?... aparece la respuesta  sorprende de Jesús: "No sabíais que debía ocuparme de las  cosas de mi Padre". Sin duda, el evangelista pone en boca de Jesús lo que será la preocupación  de toda su vida  en el cumplimiento de su misión, con lo que se nos está indicando quién es Jesús, cómo viene de Dios, y cómo está en comunión permanente con el que lo enviado, el Padre Dios.
     La celebración de la fiesta de la "Sagrada Familia", como llamamos a la familia de Nazaret, formada por Jesús, María y José, nos lleva a pensar en nuestras familias, que aunque distintas en sus formas, sin embargo  ahí tenemos los valores evangélicos: el afecto, la acogida, el diálogo, el perdón, el compartir, valores que debemos vivir como familias que siguen a Jesús.

LECTIO DIVINA DESDE LA PARROQUIA DE SAN ROQUE DE HELLÍN: VIVIRSE, PERDERSE Y ENCONTRARSE.



sábado, 22 de diciembre de 2018

Día 23 Diciembre de 2018. Domingo 4º de Adviento


LECTURAS

Miqueas 5, 1-4a
Salmo responsorial 79
Hebreos 10, 5-10
Lucas 1, 39-45


    En este final de Adviento, María es la figura central: ella es portadora de Dios en el NIño que se gesta en su vientre, y por ello portadora de alegría y esperanza. Junto a María, aparece Isabel, también mujer de pueblo, mujer de fe que nos da una lección, admirada ante la presencia de Dios.
    María es la nueva humanidad salida de la fe, como reconoce Isabel al saludarla: "Dichosa tú que has creído, porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá".
    Isabel representa al grupo de creyentes del Antiguo Testamento que esperaba el cumplimiento de las profecías, y al mismo tiempo representa la humanidad que recibe a Dios, y que agradecida, exclama y se pregunta: "Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? 
   En la Misa de cada domingo, en Navidad, Jesucristo, Dios y hombre verdadero nos visita, viene a nuestro encuentro: ¿Nos admiramos los cristianos de que nos visite? ¿Nos sentimos agraciados y agradecidos como Isabel?
   De María y de Isabel aprendemos a preparar y vivir la Navidad.
   Les deseo a todos una feliz Navidad, y que  hagamos posible que Jesucristo  entre en nuestras familias.


LECTIO DIVINA DESDE LA PARROQUIA DE SAN ROQUE DE HELLÍN: LUZ REGALO QUE VISITA

HOJA DOMINICAL DIOCESANA: ¡OS ANUNCIAMOS UNA GRAN ALEGRÍA!

domingo, 16 de diciembre de 2018

Día 16 de Diciembre de 2018. Domingo 3º de Adviento


LECTURAS

  • Sofonías 3, 14-18a
  • Salmo responsorial:  Isaías 12, 2-6
  • Filipenses 4,4-7
  • Lucas 3, 10-18




    Las lecturas de este domingo desbordan alegría y esperanza, porque el Señor está cerca, lo que nos motiva a estar contentos y agradecidos. 
    El personaje protagonista en el evangelio es Juan Bautista. La gente estaba contenta, porque al fin, había surgido un profeta en medio del pueblo, después de una sequía de 3 siglos sin nadie que orientara  en nombre de Dios. 
     La gente acudía en masa a escuchar al Bautista, y por ello le preguntaban : "¿Qué debemos hacer? "El que tenga dos vestidos, que dé uno al que no tiene, y el que tenga comida, que haga lo mismo"; y de modo parecido, Juan daba respuesta a las preguntas . Juan era radical en sus respuestas; no se iba por las ramas, ni a medias tintas. En definitiva  lo que decía y nos dice es: "sé justo en tu proceder: en tu relación con la familia, con tus vecinos, en tu trabajo, en tus negocios..."
     Todos queremos que las cosas vayan a mejor, pero con frecuencia, esperamos que los demás hagan algo, que muevan ficha. Pero, para que esto suceda, cada uno debemos preguntarnos: ¿En qué puedo cambiar yo? ¿Qué puedo hacer por los demás? Está claro que para que las cosas cambien a mejor es preciso  que empecemos cambiando nosotros mismos. Lo peor es decir y hacer "lo que hace todo el mundo".
      Las  palabras de  un  poema de Rabindranath Tagore son elocuentes: "Dormía y soñaba que la vida  era alegría; desperté y vi que la vida era servicio; me puse a servir y vi que el servicio era alegría". Parecido a lo que  dijo Jesús: "EL que quiera ser el primero que sea el servidor de todos".



LECTIO DIVINA DESDE LA PARROQUIA DE SAN ROQUE DE HELLÍN: PREGUNTARNOS

HOJA DOMINICAL DIOCESANA


jueves, 6 de diciembre de 2018

Día 2 de Diciembre 2018. Domingo Primero de Adviento


LECTURAS

  • Jeremías 33, 14-16
  • Salmo responsorial 24
  • 1 Tesalonicenses 3, 12-4,2
  • Lucas 21, 25-28.34-36
     El evangelio de hoy nos llama a derribar y construir. Cada persona, cada cristiano, en este comienzo de Adviento estamos llamados a una remodelación de nuestro ser y de nuestra esperanza, porque la fe no es algo fijo, sino que lo mismo que la persona es cambiante en lo físico, mental e intelectual, también la fe ha de crecer a la par, y para ellos es menester cultivarla y alimentarla Por eso, Dios nos hace deshacer y rehacer.
      Lo que Dios quiere es que  derribemos lo que hemos construido según nuestros gustos marcados por el egoísmo y no según el gusto de Dios, que quiere que cada persona esté llena de luz y que se libere de los apoyos inútiles, convirtiéndose en persona abierta a los demás.
      El evangelio no nos habla de final catastrófico, sino de la realización  del reino de Dios, en el que brillará la justicia, el amor, el perdón, la paz, frutos que mostrarán que la salvación de Dios es una realidad cumplida, y esto se realizará por acción directa de Dios. Entre tanto, Jesús nos invita, diciéndonos: "Estad despiertos y pedid fuerza en todo momento para escapar de lo que os pueda ocurrir".

QUIERO VER: ESTAD DESPIERTOS