LECTURAS
Génesis 2, 18-24Salmo responsorial 127, 1-2.3.4-5.6Hebreos 2, 9-11Marcos 10, 2-16
A la pregunta capciosa que los Fariseos dirigen a Jesús sobre la legislación y práctica vigente en aquel tiempo sobre el divorcio, que podían ejercer unilateralmente el marido sobre la mujer, Jesús responde, en primer lugar indicando que eso lo permitió Moisés por la mentalidad degenerada del pueblo, por la "dureza de corazón", y acto seguido, acude a lo que dice el Génesis, señala el proyecto originario de Dios sobre la unión del hombre y la mujer unidos en matrimonio, con una conclusión, original de Jesús: "lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre". Esta propuesta de Jesús está en la base del pensamiento y práctica de la Iglesia acerca del matrimonio cristiano o sacramental.