sábado, 11 de noviembre de 2023

Día 12 noviembre de 2023. Domingo 32 del Tiempo Ordinario. Día de la Iglesia Diocesana.



 


LECTURAS

  • Sabiduría 6,12-16
  • Salmo responsorial 62,2.3-4.5-6.7-8
  • 1 Tesalonicenses 4,13-18
  • Mateo 25,1-13 

   Nos acercamos al final del año litúrgico, que culminará con la fiesta de Jesucristo, Rey o Señor universo. Esto es ocasión para hacernos preguntas últimas, importantes en la vida de una persona. Así la pregunta que nos sugiere el evangelio es: ¿Cuándo será la vuelta definitiva del Señor?

   Jesús nos responde con la parábola de las 10 vírgenes: 5 sensatas y 5 necias. Se trata de una invitación a reflexionar sobre nuestra vigilancia en la vida cristiana, pensando en el fin de los tiempos y el encuentro con el Señor que, aunque no sabemos cuándo, sin embargo, llegará.

   Al narrar esta parábola, Jesús nos recuerda la importancia de mantenernos atentos con la luz de la fe encendida, que son las buenas obras y el amor, para que estemos preparados cuando suceda la venida del Señor. Podríamos decir que la actitud  que nos propone Jesús es la de “estar siempre listos”.

   Las 10 jóvenes del evangelio son figuras simbólicas en las que nos podemos ver reflejados todos los creyentes cristianos, que esperamos la venida del Señor, representada en el novio que viene para la boda. La actitud de las jóvenes, unas con aceite en las lámparas y alcuzas, y otras que no lo llevan, nos indica la importancia y necesidad de profundizar siempre en nuestra vida espiritual. Por tanto, la parábola de hoy es un retrato de cómo vivimos cada cristiano nuestra fe.



LECTIO DIVINA DE LA PARROQUIA DE SAN ISIDRO DE ALMANSA


 DIA DE LA  IFGLESIA DIOCESANA

 “Orgullosos de nuestra fe”. Este es el lema que se nos propone el Día de la Iglesia Diocesana, que celebramos  el 12 de noviembre. Un Día de fiesta y celebración, en el que “recordamos y agradecemos nuestra pertenencia a una comunidad cristiana”. Y un Día para el agradecimiento y para tomar conciencia de que somos miembros de una gran familia. Lo que la Iglesia hace “es gracias al tiempo, las cualidades, la oración y el apoyo económico de todo el pueblo de Dios”.



Cada año, el Día de la Iglesia diocesana pone en marcha esta Campaña para reforzar ese sentimiento de pertenencia de los creyentes y para “tocar” su corazón, también el de aquellos que, por distintas circunstancias de la vida, se han alejado de la práctica religiosa. Porque la celebración y la vivencia de la fe son un motivo de alegría en un mundo sediento de esperanza. También es una oportunidad para reconocer y agradecer todo el bien que hace la Iglesia.

Somos Iglesia sinodal, que “caminamos juntos”.
Juntos llegamos más lejos

Un bien que se hace posible por la corresponsabilidad. Para ello, se proponen cuatro alternativas de colaboración: 

– Tu oración: Puedes rezar por tu parroquia porque tu oración es necesaria y será el alma de toda la actividad que se realice. Con ella, los frutos serán mayores y más permanentes.

– Tu tiempo: Dedica algo de tu tiempo en tu parroquia a los demás. El tiempo que puedas: media hora, una, tres horas… Lo que se ajuste a tu situación de vida.

– Tus cualidades: Cada uno puede aportar un poco de lo que sabe: una sonrisa cercana, una mano que apoya un hombro desconsolado, remangarse cuando sea necesario, acompañar en silencio al que sufre.

– Tu apoyo económico: Haz un donativo. Con tu aportación periódica ayudas más, porque permiten elaborar presupuestos y mejorar la utilización de los recursos y planificar acciones a medio y largo plazo.

Una colaboración que ha hecho posible en España que más de cuatro millones de personas hayan podido ser atendidas en centros asistenciales de la Iglesia; que sujetan las más de 22.000 parroquias que están al servicio de toda la sociedad; y que sacerdotes, voluntarios y seglares puedan dedicar más de 40 millones de horas a los demás. También gracias a esa corresponsabilidad, hay más de 10.000 misioneros españoles en los cinco continentes.