LECTURAS
- Exodo 32,7-13-14
- Salmo rsponsorial 50, 3-4.12-13.17. 19
- 1 Timoteo 1,12-17
- Lucas 15, 1-32
"Yo perdono, pero no olvido", decimos con frecuencia los cristianos. Pues bien, como podemos observar, todas las lecturas nos hablan hoy del perdón y misericordia de Dios: nos muestran el estilo de obrar de Dios para con nosotros y nos invitan a "aprender" a saber perdonar, aunque no sea fácil, porque cuando se tiene heridas, al tocarlas duelen como bien sabemos por experiencia.
Jesús con las parábolas que nos relata hoy nos está diciendo que Dios cree en las personas, y cree en la capacidad de cambio; por eso espera pacientemente. Este es el retrato que Jesús nos presenta de Dios, y ésta es la razón por la que Jesús "se acercaba y comía con pecadores", para darles la oportunidad de volver a Dios y sentirse queridos por él.
En todas estas lecturas hay una idea común: "en el cielo habrá gran alegría por un solo pecador que se convierta". Este tono de alegría debería ser lo propio de todo grupo o comunidad cristiana, como muestra San Pablo quien experimentó la compasión de Dios y la llamada a ser "apóstol".
