lunes, 22 de junio de 2015

Encíclica del papa "Laudato si´".


Con fecha del 24 de mayo de 2015, pero hecha pública el 17 de junio, el papa Francisco regala a la Iglesia y al mundo la encíclica "Laudato si", título inspirado  en las primeras líneas  del Cántico  de las criaturas" de San Francisco de Asís, "Laudato si´, mi´ Signore" ( Alabado seas, mi Señor). 
Con esta encíclica  nos lleva el papa  a realizar una mirada de respeto y cuidado hacia la creación, "sobre el cuidado  de la casa común", y por ello nos invita a tomar en serio  la creación, escenario sobre el que Dios nos ha puesto a hombres y mujeres, como leemos en las primera página del Génesis, y nos exhorta a hacer un uso responsable, lo que exige una conversión que ponga  fin a la sobre-explotación  de los recursos materiales, ya que el ritmo imparable del mundo industrializado, no  permite una mundo futuro sostenible, especialmente para las futuras generaciones, y por supuesto,  para los más pobres de la tierra que, por lo general,  son aquellos de donde proceden las materias primas, cuyas tierras explotadas, está provocando desplazamientos de poblaciones, entre ellos las oleadas de inmigrantes que llegan en pateras a nuestras costas, y que son privados de la tierra que les vio a nacer a ellos y a sus antepasados.
Hasta la fecha no se han oído muchas voces del mundo de las finanzas y multinacionales, pero seguro que dicha encíclica no es de su agrado, porque denuncia el uso abusivo de los bienes que han sido creados por Dios y dados para bien del todos los hombres y mujeres, y que está dando lugar a una sociedad del "descarte", que llama el papa.
Merece la pena que nosotros, los cristianos, leamos esta documento del papa, de doctrina social de la Iglesia. Que no nos limitemos a leer simplemente los titulares de prensa, sino que vayamos a la fuente. La ofrecemos en este Blog, como puedan verla a la derecha; y si la quieren impresa en papel y bien encuadernada, la pueden encontrar en la Librería Biblos, por el módico  precio de 3,46 euros.
Puede ser  un librito  que  nos acompañe este verano, especialmente en los días tranquilos de vacaciones, y buena ocasión de beber el evangelio aplicado al problema del "calentamiento global" de la tierra, que nos afecta a todos, y de todos depende la solución.