PAPA LEÓN XIV
LECTURAS
- Hechos de los Apóstoles 13, 14.43-52
- Salmo responsorial
- Apocalipsis 7,9,14b-17
- Juan 10, 27-30
En la historia del pueblo de Israel aparecen
grandes personajes que ejercían el oficio de pastores: Abraham, Isaac, Jacob, Moisés,
David. Así como el “pastor” tiene la tarea de conducir, proteger, y buscar
buenos pastos para sus ovejas, la imagen del “pastor”, en la Biblia, pasó a ser
la imagen que representa a los dirigentes, a los que Dios les encarga de
conducir y proteger a su pueblo en su nombre. Hubo algunos que fueron buenos pastores
o dirigentes, pero también hubo muchos, que no dieron la talla, fueron mala gente. Así lo denunciaba el profeta Jeremías, quien decía; “Ay de los
pastores de Israel que se apacientan a sí mismos; ¿no deben los pastores
apacentar a las ovejas?”. Tras estas duras palabras, Jeremías profetizó que
Dios será el Pastor del pueblo. Esta profecía se cumplió en Jesús, quien se
aplica a sí mismo el título de “Buen Pastor”.
Esta es una de las mejores imágenes
que tenemos de Jesús, que nos guía y cuida. Y nosotros estamos llamados a
formar su familia, es decir, a estar en comunión con él y caminar juntos (Iglesia
sinodal). En el evangelio de hoy Jesús nos dice
que él conoce a sus ovejas. No somos seres anónimos, sino que nos conoce por
nuestro nombre y se preocupa por nosotros. Jesús promete que nunca nos dejará
solos, y con él caminamos hacia una vida definitiva, donde habrá justicia y
encontraremos el consuelo.
El evangelio de hoy, nos indica la
importancia de escuchar la voz de Jesús, y la gran suerte que significa formar
parte de su familia la Iglesia. Cada
domingo, nuestro encuentro en la Eucaristía es la ocasión en la que nos
reunimos como familia de Dios, y escucha su Palabra, como nos dice Jesús en el evangelio:
“Mis ovejas escuchan mi voz, y yo las conozco, y ellas me siguen y yo les doy
la vida eterna”.
Precisamente porque Jesús se autodefine “Buen
Pastor”, hoy celebramos la jornada de oración por todas las vocaciones. Oramos especialmente por quienes han
recibido la llamada de hacer presente a Cristo, Buen Pastor, como es el caso
del papa León XIV, nuestro obispo Ángel, los obispos, los sacerdotes, religiosos-as,
y también todos los cristianos que tienen alguna responsabilidad en la Iglesia,
o en distintos ámbitos de la sociedad, como los padres en la familia.
LECTIO DIVINA SAN ISIDRO DE ALMANSA
HOIJA DOMINICAL DIOCESANA
PRIMERAS COMUNIONES
11 MAYO DE 2025
En la historia del pueblo de Israel aparecen grandes personajes que ejercían el oficio de pastores: Abraham, Isaac, Jacob, Moisés, David. Así como el “pastor” tiene la tarea de conducir, proteger, y buscar buenos pastos para sus ovejas, la imagen del “pastor”, en la Biblia, pasó a ser la imagen que representa a los dirigentes, a los que Dios les encarga de conducir y proteger a su pueblo en su nombre. Hubo algunos que fueron buenos pastores o dirigentes, pero también hubo muchos, que no dieron la talla, fueron mala gente. Así lo denunciaba el profeta Jeremías, quien decía; “Ay de los pastores de Israel que se apacientan a sí mismos; ¿no deben los pastores apacentar a las ovejas?”. Tras estas duras palabras, Jeremías profetizó que Dios será el Pastor del pueblo. Esta profecía se cumplió en Jesús, quien se aplica a sí mismo el título de “Buen Pastor”.
Precisamente porque Jesús se autodefine “Buen Pastor”, hoy celebramos la jornada de oración por todas las vocaciones. Oramos especialmente por quienes han recibido la llamada de hacer presente a Cristo, Buen Pastor, como es el caso del papa León XIV, nuestro obispo Ángel, los obispos, los sacerdotes, religiosos-as, y también todos los cristianos que tienen alguna responsabilidad en la Iglesia, o en distintos ámbitos de la sociedad, como los padres en la familia.